(Complicaciones en el Trastorno Bipolar)
Dublín, Irlanda, 1974, los O’Connor se separan definitivamente, a Sinéad que es la tercera de cinco niños le toca ir a vivir con su madre. Ella la decribía como una mujer “sádica y pedófila” narraba que la maltrataba desnuda y la amenazaba con quemar sus genitales, diciéndole que era “fea, nada y que hubiera preferido que no naciera o que fuera niño”; “abusó de mí sexual y físicamente”.
Cansada del maltrato escapó a casa de su padre cuando tenía 15 años, en breve fue internada en un centro correccional por mala conducta y robo. Era un Centro llamado Griana dirigido por un grupo religioso. En ese lugar empezó a tocar la guitarra y una de las voluntarias descubrió su gran talento.
A los 17 años ingresó a la “Newton School” donde su profesor de lengua la apoyó a grabar su primer álbum.
En 1984 abandonó los estudios y se integró a un grupo como vocalista y empezó a tener mucho éxito en su país.
Un año después su madre murió en un accidente llevando a O’Connor a un primer episodio depresivo: tenía una relación de amor-odio con ella y nunca se pudo reconciliar.
En 1989 Prince escribió una canción para ella “Nothing compares 2 U” que la lanzó a la fama mundial, ganando un Grammy en 1991, el cual no aceptó por considerarlo un premio ligado a éxito económico argumentando que ella era una artista.
Aquí empezó su larga historia de hechos polémicos: 1992, en el espectáculo “Saturday Night Live” cantó la canción “War” de Bob Marley cambiando la palabra “racismo” por “abuso sexual” y sacó una foto de Juan Pablo II que rompió frente a millones de espectadores acusando al pontífice de permitir el abuso sexual infantil.
Por esas fechas se negó a cantar el himno nacional de E.U. En el 2000 se declaró públicamente lesbiana, retractándose poco después para decir que era bisexual.
En todo este tiempo tuvo 4 matrimonios y 4 hijos: debido a su inestabilidad y sus problemas de salud mental no le fue posible cuidarlos. Los dos mayores crecieron con sus respectivos padres y los dos menores pasaron largas temporadas en casas de asistencia en Irlanda; una historia que no ha sido superada desafortunadamente se repite.
En este largo proceso de enfermedad: se declaró sacerdotisa para pasar a ser catequista, diciendo que “su misión era rescatar a Dios de la religión”.
En 2003 declaró que sufría dos enfermedades mentales: Trastorno Bipolar y Estrés Post-Traumático por el abuso infantil y anunció su retiro de la música.
Desde entonces alternaba retirándose y regresando a la escena musical.
En 2015 fue sometida a una operación en la que le quitaron la matriz y los ovarios y su descompensación afectiva fue tan grave que en los dos años siguientes tuvo 8 intentos suicidas.
En su cuenta de Facebook publicaba videos donde explicaba que lo único que la mantenía viva era su psiquiatra, que “es una buena persona” y le aseguraba “que ella es muy valiente y se curará”.
El Trastorno Bipolar es una enfermedad mental que afecta el estado de ánimo presentando cambios entre alegría extrema y depresión profunda. El tratamiento debe incluir fármacos que eviten nuevas recaídas entre los que se consideran el grupo de los estabilizadores del ánimo como litio, antipsicóticos atípicos y anticomiciales, junto con educación de la enfermedad a la familia y al paciente para que cuiden sus hábitos de sueño y alimentación que son fundamentales para evitar las recaídas.
En las mujeres bipolares la menopausia puede agravar los episodios depresivos porque la falta de estrógeno se asocia con más insomnio, es probable que sea uno de los eventos que agravó su enfermedad mental de O’Connor al ser operada.
La cantante se fue deteriorando en forma significativa pues si analizamos su funcionalidad: no pudo mantener una pareja estable, no pudo cuidar a sus hijos, su carrera musical con altas y bajas con la consecuencia de inestabilidad económica. No se tiene información acerca de si O’Connor recibía tratamiento para su enfermedad mental, pero es probable que la falta de un tratamiento bien estructurado y redes de apoyo familiar contribuyeron a su complicada y tórpida evolución, es probable que además del trastorno bipolar haya sufrido además un trastorno grave de personalidad.
Sus fallas de juicio eran claras pues la mayoría de los detalles de su triste infancia los reveló en programas como Dr. Phill, culpaba a su hijo mayor de mantener alejados a sus otros hijos cuando aparentemente este joven lo único que trataba de hacer era cuidar de sus hermanos.
En enero de 2022 su hijo Shane de 17 años escapó de un hospital donde estaba siendo tratado por riesgo suicida, apareció muerto, a partir de este momento la cantante a través de sus redes sociales revelaba: “Desde entonces, vivo como una criatura nocturna no muerta. Él era el amor de mi vida, la lámpara de mi alma”.
En julio de 2023 falleció en su casa a los 56 años, en Herne Hill, Londres, Inglaterra, su familia no explicó la causa de muerte y pidió privacidad.
Está sepultada en Bray, un pueblo irlandés donde residió 15 años.
En sus palabras: “No hago nada para causar problemas. Sólo ocurre que lo que hago naturalmente causa problemas. Estoy orgullosa de ser una agitadora”